Calendario lunar para cultivos de Marihuana

Luna Nueva

Aquí la luna no es visible, no la vemos desde la tierra. La savia de nuestras plantas se va a las raíces, reduciendo así su actividad. En este momento es ideal podar nuestras plantas, también trasplantarlas. Con ello conseguiremos que sufran menos y crezcan mejor durante las siguientes fases.

Cuarto creciente

Enseguida se identifica, ya que veremos en el cielo una C invertida. Señal de que la luz de la luna va ganando tantos. La actividad de la planta se incrementa por lo que no se recomienda podar. En cambio, es un momento idóneo para germinar semillas. Tiene su lógica, ¿verdad? En este momento, si germinamos, haremos que el proceso tome carrerilla, con lo que el éxito de nuestras germinaciones se incrementa.

Luna Llena

La luna brilla en lo alto del cielo con todo su esplendor, redonda o casi redonda. En esta fase la savia interna está más activa y en más cantidad en las partes aéreas de la planta. Estas partes se van a desarrollar con más fuerza, por lo que no es aconsejable realizar podas o esquejes.

Cuarto menguante

La luna adquiere la característica forma de C. La savia de la planta se repliega hacia las raíces. Este momento es óptimo para abonar las plantas, ya que estas tendrán más energía en la zona de las raíces y se nutrirán mejor. Como veis, la clave para entender este diagrama está en ver cómo fluye la savia dentro de la planta.

Si eres un perfeccionista y para rizar el rizo la luna, en su fase de 29 días, sube su órbita durante 14 días (fase ascendente) y baja durante otros 14 (fase descendente), en la fase lunar ascendente, se pueden cortar los mejores esquejes, ya que estos tendrán mucha vitalidad, aunque cuidado con las podas o con que la planta madre pierda demasiada savia en la operación.

Al contrario, con luna en su fase descendente la savia de las plantas de marihuana se dirigirá hacia abajo incrementando la actividad de la planta en sus raíces, buen momento para plantar, podar, trasplantar, abonar o germinar.

Si te soy sincero, esta última parte es mejor no tenerla en cuenta si no eres un profesional de la materia. Es suficiente con que entienda los ciclos lunares básicos y los aproveches a tu favor. Sólo nos faltaría saber algo sobre los nodos, los apogeos y los perigeos pero, como en el caso anterior, esta información ya es limar muy fino y quizá para lo que lo vamos a usar nosotros, es mejor quedarnos con la base y ponerla en práctica.